1- Introducción.
Desde hace más de una década, el campo de la protección de las personas más vulnerables y la lucha contra la discriminación por delitos de odio, pasó a convertirse en una prioridad para España, de tal forma que en el año 2012, esta preocupación derivó en la consecución del Proyecto Europeo “Progress”, con el que se desarrolló el Programa FIRIR (Formación para la Identificación y Registro de Incidentes Racistas) conjuntamente por la Secretaría de Estado de Seguridad y el Observatorio Español contra el Racismo y la Xenofobia (OBERAXE) de la Secretaría General de Emigración e Inmigración del Ministerio de Empleo y Seguridad Social. Pero pronto se observó que había que ir mejorando la identificación, formación, prevención y, en definitiva, la lucha contra los delitos de odio que sufrían otros muchos colectivos.
En este sentido, la justificación es clara, los delitos de odio van en contra de los derechos universales que tienen todas las personas por el mero hecho de serlo, los derechos humanos. Por ello, resulta necesaria una protección tanto en el ámbito jurídico como social, dando respuesta a peticiones que el tercer sector va planteando debido a la necesidad de reconocer penalmente nuevas circunstancias, como sucedió en el año 2022, al reconocerse, de forma independiente y expresa, el “antigitanismo” en el código penal español (Gobierno de España, 1995). No obstante, en las estadísticas oficiales del Ministerio del Interior, publicadas anualmente en los correspondientes informes de la evolución de los delitos de odio en España, ya se recogía, esta circunstancia, de forma desglosada del “Racismo/Xenofobia” desde el año 2019, por la necesidad de un mayor conocimiento de esta realidad.
2- Principales avances en el ámbito de las fuerzas y Cuerpos de Seguridad en este ámbito
Una vez dado los primeros pasos en la dirección de conseguir una mayor protección de los Derechos Humanos mediante la lucha contra unos “delitos” que han existido desde siempre, pero que ahora tenían su propia expresión “delitos de odio” y como fruto del referido programa FIRIR, en el año 2013, se editó el Manual de apoyo de las fuerzas y cuerpos de seguridad en la identificación y Registro de Incidentes Racistas y Xenófobos, coordinado, en ese momento, por la Secretaría General de Inmigración y Emigración del Ministerio de Empleo y Seguridad Social y la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior. El objetivo de la publicación fue servir de apoyo a las fuerzas y cuerpos de seguridad en la detección y registro de incidentes racistas o xenófobos. Por lo que para poder registrar estos delitos de odio se tuvieron que hacer las modificaciones correspondientes en el Sistema Estadístico de Criminalidad (SEC), y consecuentemente, de las normas de grabación de los datos de criminalidad a seguir por los miembros de las fuerzas de seguridad.
Otro hito importante fue la publicación, por primera vez del Informe sobre la evolución de los delitos de odio en España (Ministerio del Interior, 2013), relativo a datos del año 2013, siguiendo las recomendaciones del Consejo JAI (diciembre 2013), que reflejaba y daba a conocer la cifra de incidentes relacionados con conductas discriminatorias denunciados por la población y registrados por los organismos policiales. A este informe le han seguido los siguientes años su correspondiente, pudiéndose observar que la recogida de datos es cada vez mayor y su calidad mejora sustancialmente debido, principalmente, a la formación y sensibilización de los efectivos policiales y a la recogida de ámbitos concretos y definidos de los motivos subyacentes en los sucesos que dieron lugar a las diligencias de los atestados policiales. No en vano, la propia Agencia Europea de los Derechos Fundamentales ha puesto de manifiesto que España se ha situado en estos años como uno de los cinco países que mejor recogen los datos para el registro de este tipo de delitos.
Posteriormente, se adoptó la Instrucción nº 16/2014 de la Secretaría de Estado de Seguridad, por la que se aprueba el “Protocolo de actuación para las fuerzas y cuerpos de seguridad para los delitos de odio y conductas que vulneran las normas legales sobre discriminación” (Gobierno de España, 2015). Nos hallamos ante el primer protocolo de actuación policial para erradicar la discriminación y la violencia por delitos de odio en España. Esta Instrucción fue modificaba al año siguiente en el año 2015, debido a las diferentes reformas legislativas acaecidas ese año en el ámbito penal y procesal y en los años 2020 y 2023, al ser un documento “vivo” que se debe ir actualizando y mejorando paulatinamente.
En el mismo orden de cosas, desde el año 2014, se llevó a cabo el desarrollo de un apartado específico dedicado a los delitos de odio en la web del Ministerio del Interior, principalmente con la finalidad de apoyo a las víctimas de estos delitos, así como a los familiares y conocidos con diversas guías de actuación para poder descargar. Igualmente, esta web incluye información básica sobre ¿qué es un delito de odio?, ¿por qué hay que denunciarlo? y consejos a seguir ante estos hechos, así como otros enlaces de interés. Dentro de la web se incluyeron unos trípticos informativos que recogen de manera sencilla y esquemática información dirigida a las víctimas de delitos de odio y a la sociedad en su conjunto, contribuyendo así, a la sensibilización colectiva, acerca de cómo identificar y, en su caso, denunciar este tipo de delitos ante las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.
Otro avance en la lucha contra los delitos de odio ha sido la creación de la Oficina Nacional de Lucha Contra los Delitos de Odio (ONDOD), formada por componentes de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, mediante la Instrucción nº 1/2018 de Secretaría de Estado de Seguridad, (Gobierno de España, 2018) de acuerdo a las competencias asignadas a esta Secretaría por el Real Decreto que desarrolla la estructura orgánica básica del Ministerio del Interior, como unidad dependiente del Director del General de Coordinación y Estudios, asesorando a través del mismo al Secretario de Estado de Seguridad en materia de delitos de odio, aportando la información estratégica y técnica oportuna para la adopción de políticas públicas en relación a los delitos de odio.
La Oficina Nacional de Lucha Contra los Delitos de Odio (ONDOD) es, de igual forma, responsable de la coordinación entre la Secretaría de Estado de Seguridad y sus organismos dependientes, a la hora del intercambio de información y su difusión; de la formación conjunta de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, con especial relevancia en el trato hacia las víctimas, así como cualquier otra cuestión que pueda servir para mejorar la actuación policial en la lucha contra esta criminalidad. Para ello, esta Oficina actúa como observatorio sobre el fenómeno, recabando información y originando análisis estratégico para la adopción de nuevas iniciativas que atajen este problema, estableciéndose como punto de contacto nacional ante otros organismos internacionales especializados en la materia.
Otro hecho importante es la aprobación, en enero de 2019, del Primer Plan de Acción de lucha contra los delitos de odio (Oficina Nacional de Lucha Contra los Delitos de Odio, 2019), con el objeto de reducir el daño causado por los delitos de odio, para mejorar la respuesta dada por las fuerzas y cuerpos de seguridad e incrementar la confianza en ellas de los colectivos vulnerables. Las medidas de este Plan tienen especial consideración por la necesaria participación de las organizaciones representativas de colectivos vulnerables, sin las cuales este documento habría perdido gran parte de su valor práctico.
En 2020 se inició con la coordinación de la OSCE/ODHIR y la VBRG (Asociación de Centros de Asesoramiento para Víctimas de la Violencia de Derecha, Racista y Antisemita) de Alemania, el Proyecto ‘EStAR’ (Enhancing Stakeholder Awareness and Resources for Hate Crime Victim Support). Este proyecto, cuya duración fue de dos años (2020-2021), contó con el apoyo de la Comisión Europea, para un enfoque centrado en las víctimas de delitos de odio y siendo su intención, producir herramientas para mejorar la protección y los servicios para las víctimas de estos delitos. España participó mediante representantes de la ONDOD, en la conferencia final del proyecto EStAR que tuvo lugar el 22 y 23 de marzo de 2022, dando a conocer las buenas prácticas y los avances del proyecto en nuestro territorio nacional.
En el mes de septiembre del año 2021 se dio por finalizada la vigencia del primer Plan de Acción mediante la Comisión extraordinaria de Seguimiento que presidió el Presidente del Gobierno en la que se anunciaron las ocho líneas de acción del II Plan de Acción de Lucha Contra los Delitos de Odio 2022-2024 (Oficina Nacional de Lucha Contra los Delitos de Odio, 2022). Este Plan se presentó por el Ministro del Interior en Consejo de Ministras y Ministros del 12 de abril de 2022. Dentro de este segundo Plan de Acción se puede destacar, entre otras cosas, la creación de los Equipos de Extremismo Violento y Odio (EVO) de Policía Nacional y los Equipos de Respuesta a los Delitos de Odio (REDO) de Guardia Civil. Estos Equipos están incardinados en el ámbito de la Jefatura de Información de la Guardia Civil y de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional, así como en el despliegue periférico de Información los referidos Cuerpos.
En aras de mejorar la coordinación policial en el ámbito de la lucha contra los delitos de odio y en cumplimiento de lo establecido en este segundo Plan de Acción, se constituyeron dos grupos de trabajo, el primero el “Grupo Técnico de Trabajo de Delitos de Odio”, integrado por los Interlocutores Sociales Centrales de ambos Cuerpos Policiales estatales y, el segundo, el “Grupo de Trabajo de Análisis y Coordinación”, formado por los anteriores, así como de representantes del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) y las unidades relacionadas con este ámbito, de las tres Policías Autonómicas (Mossos d´Esquadra, Ertzaintza y Policía Foral de Navarra).
Ambos Grupos, coordinados por la ONDOD, tienen el objetivo de desarrollar las medidas a implementar del II Plan de Acción, relacionadas con la aplicación de metodología homogénea en lo relativo a la formación y sensibilización a Cuerpos policiales, unificación de sistemas de trabajo en relación al tratamiento sobre delitos de odio, coordinación con la seguridad privada, relaciones con la comunidad y el tercer sector y la aplicación de los planes existentes en la Secretaría de Estado de Seguridad, como el Plan Director para la convivencia y mejora de la seguridad en los centros educativos y sus entornos. Igualmente, en lo relativo al Grupo de Trabajo de Análisis y Coordinación, se pretende el intercambio de buenas prácticas y análisis de interés mutuo en la materia.
Finalmente, es interesante citar dos proyectos colaborativos con financiación de la Comisión Europea, en los que la ONDOD participa como socio y que se enumeran a continuación:
- Proyecto europeo REAL UP (2022), para la mejora de las capacidades de las autoridades estatales al objeto de identificar, analizar, supervisar y evaluar el discurso de odio en línea y así desarrollar y fortalecer las estrategias de contranarrativa (discurso ‘upstander’) contra el discurso de odio motivado por el racismo, la xenofobia, la islamofobia, el antisemitismo y el antigitanismo mediante el debate, y la generación de un mapa de buenas prácticas y herramientas didácticas y efectivas contra el discurso de odio en la red, entre otros objetivos.
- Proyecto europeo CISDO (2023) para la “Cooperación Inter-policial y Social contra los delitos de odio” en la sede del Ministerio del Interior. El objetivo general del proyecto es mejorar las capacidades de las fuerzas y cuerpos de seguridad a nivel nacional, tanto de la Policía Nacional, como de la Guardia Civil, y en el ámbito local, de las Policías locales o Municipales, para prevenir, identificar, mediar y luchar contra los incidentes racistas y xenófobos, y en especial los discursos y delitos de odio que amenazan la convivencia pacífica en las ciudades. Los objetivos específicos son aumentar la cooperación y el intercambio de información entre las fuerzas y cuerpos de seguridad con las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) especializadas en atención a víctimas de delitos de odio. La colaboración con las OSC se vehiculará, a través de las “comunidades de prácticas” en las ciudades participantes.
3 - Conclusiones
En resumen, se puede concluir que aquellas semanas convulsas confirmaron que existen indicadores o elementos en los incidentes críticos o conflictos en los barrios a los que instituciones, ciudadanía, equipos técnicos de intervención social, y medios de comunicación han de prestar atención. Se trata de identificar, a tiempo, las retóricas antigitanas o racistas que surgen oportunistamente a raíz de incidentes o conflictos con el objeto de culturalizarlos, imputándoselos no al individuo responsable, sino a un colectivo o grupo social dando lugar a esa peligrosa construcción de la oposición lexical pronominal de un “nosotros” (los vecinos), enfrentados a un “ellos” (los gitanos) (Van Dijk, T. 1994). Se trata de identificar a tiempo este punto de ignición que, en no pocas ocasiones, se alimenta del tratamiento sensacionalista de algunos medios y redes sociales, y ser conscientes del riesgo que supone perder el relato de la convivencia (siempre en disputa), por el de la hostilidad y el prejuicio. No podemos olvidar que en la organización del odio y sus retóricas, lo fundamental y la finalidad del emisor, es intentar lograr un alineamiento del que se espera una respuesta visceral de odio “comunal” (Ahmed S., 2017). Es por ello que desde el grupo de Racismo y Xenofobia de la Comisaría de Gestión de la Diversidad, tenemos presentes dos claves que creemos fundamentales: la recomendación 4 de la ECRI relativa a lucha contra el discurso de odio, que insta a luchar contra estas retóricas mediante el “contra discurso” y la necesidad de impulsar el trabajo comunitario y de mediación intercultural en los barrios, que promuevan espacios de participación, convivencia e intercambio entre los vecinos de los distritos de Madrid (Giménez, C.2009). Ahmed S. (2017) “La política cultural de las emociones” Universidad Nacional Autónoma de México. Centro de Investigaciones y Estudios de Género. México.
Dr. Tomás Fernández Villazala.
Jefe de Servicio de la Oficina Nacional de Lucha Contra los Delitos de Odio (ONDOD)
Doctor en Derecho
Bibliografía
CISDO Project. Inter-Police and Social Cooperation Against Hate Crimes. Consultado en la URL https://cisdoproject.eu/
Gobierno de España (1995). Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre, del Código Penal. «BOE» núm. 281, de 24/11/1995. Consultado en la URL https://www.boe.es/buscar/act.php?id=BOE-A-1995-25444
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REAL UP project (2022). Discurso de odio, racismo y xenofobia: Mecanismos de Alerta y Respuesta, análisis del discurso Upstander. Consultado URL https://real-up.eu/proyecto/
“La política cultural de las emociones” Universidad Nacional Autónoma de México. Centro de Investigaciones y Estudios de Género. México.